Esta copia de la Clase G tiene un motor Mercedes y es realmente más dura que la original.
Un Mercedes-Benz Clase G es el coche de ensueño de muchos. Muy duro, muy lujoso y, sobre todo, muy caro. Y es una pena. Afortunadamente, hay algunas soluciones si quieres un Clase G pero no puedes permitirte uno nuevo.
Así que puedes coger uno viejo y modernizarlo. Puedes cambiarle fácilmente la parrilla, los faros, los parachoques y otras piezas.
Force Citiline = ¿Copia de la Clase G?
Pero también puedes comprar un coche que PAREZCA un Clase G. Hay unos cuantos. Piensa en el INEOS Grenadier, el Suzuki Jimny (con bodykit) o este Force Citiline. Se trata de un enorme acorazado procedente de la India y más cómodo que el auténtico Clase G. Al fin y al cabo, cabe mucha gente.
Y con eso queremos decir MUCHA gente. La Clase G normal tiene dos filas de asientos y espacio para cinco personas. El Force Citiline tiene dos filas extra. Sí, EXTRA. En la parte delantera, hay espacio para dos personas y un termo. En la segunda fila, hay espacio para tres personas en este ejemplar de la Clase G.
Luego sigue una tercera fila de asientos con dos plazas. Luego hay una fila de asientos trasera con tres plazas. Así que, en total, pueden viajar diez personas (incluido el conductor). En los Países Bajos, por cierto, es una persona de más, ocho sin contar al conductor (según el Gobierno central).
Motor Mercedes-Benz original
Para hacernos una idea del tamaño: este ejemplar indio de la Clase G mide 5,12 metros de largo y la distancia entre ejes es de 3,05 metros. Como puedes ver, aunque hay mucho espacio a bordo, no hay mucho lujo. La tapicería es de tela y el resto es plástico gris. Realmente no destila riqueza ni lujo. Lo que sí es especial: el aire acondicionado se puede controlar por filas.
Por último, el motor del Force Citiline. Se trata de un cuatro cilindros diésel de 2,6 litros con inyección common rail. En términos de potencia, el motor recuerda a los G-wagon originales de los años 80, ya que dispone de 91 CV y 250 Nm de par.
Sin embargo, es un motor Mercedes-Benz, por lo que es de suponer que este bloque sin tensiones puede durar mucho tiempo. Por cierto, si prefieres un Defender indio en lugar de una copia del Clase G, el Force Trax no te decepcionará.
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